Sangre de Baco

Hallan en Bolonia el manuscrito más antiguo de la Torá

Sin votos (todavía)

En un mundo en el que los hallazgos bibliográficos relativos al mundo antiguo son cada vez más escasos, cada noticia al respecto es recibida por el mundo académico y el público en general con gran expectacion y entusiasmo. Después de que en los albores de la modernidad, los humanistas italianos despertaran en medio mundo la pasión por la recuperación de manuscritos antiguos perdidos durante todo el medievo han trascurrido siglos de búsqueda incesante e intensa, búsqueda gracias a la cual se han recobrado algunas de las grandes joyas literarias del Mediterráneo Antiguo. A comienzos del siglo XXI, las esperanzas de encontrar en las bibliotecas algún ejemplar desconocido o de antigüedad significativa son ya muy escasas. Por este motivo, sorprenden hallazgos como el hecho público en la prensa: un pergamino de la Torá datado a mediados del siglo XII. De confirmarse esta fecha, estaríamos ante el ejemplar conservado más antiguo de este libro sagrado para los hebreos.

El hallazgo se ha producido en la Universidad de Bolonia, una de las instituciones académicas mas antiguas de Europa sin cuya labor no podría entenderse la historia del Humanismo europeo. En la biblioteca de la universidad, guaradado bajo llave junto a otros textos hebreos, se encontraba un ejemplar de la Torá, rechazado hasta la actualidad por los especialistas al considerarse una copia menor sin ningún valor significativo. Sin embargo, los recientes estudios del hebreista Mauro Perani han revelado el auténtico valor de esta pieza única copiada sobre un largo pergamino de treinta y seis metros de longitud. Tal y como se recoge en la prensa, el profesor Perani se dio cuenta de que, por las características paleográficas del texto, estaba ante una obra que podía datarse antes de la labor unificadora llevada a cabo por Maiomónides a finales del siglo XII. El pergamino formaría parte, según el estudioso, de una tradición oriental ajena a la fijación del texto realizada por el teólogo sefardí en la Península Ibérica. Los análisis de laboratoria, así como el trabajo de otros investigadores que han tenido acceso al pergamino, confirman que, en definitiva, la obra hallada en Bolonia es el ejemplar más antiguo de la Torá que ha llegado hasta nuestros días.

Comentarios