La calle Salvador, en Valencia, oculta, tras la apariencia de un solar abandonado, un conjunto de ruinas romanas entre las cuales cruzaba la Vía Augusta, el camino que unía Hispania con Roma. A pesar de estar a la intemperie y a merced de los rigores del clima, estas ruinas no han recibido ninguna atención de las autoridades en los últimos tiempos, y han languidecido, ocultas a los ojos de valencianos y turistas, hasta la actualidad. La única solución que los gobiernos locales y regionales habían encontrado para estos restos, a falta de un proyecto y de financiación para llevarlo a cabo, fue volver a enterrar el yacimiento y ocultarlo por completo, de forma que al menos se detuviera su evidente deterioro.

El nuevo gobierno regional de Valencia tiene, sin embargo, otros planes. En lugar de proceder a enterrar los restos de la calle Salvador, se llevará a cabo un ambicioso proyecto para ponerlos en valor y darles el peso que su importancia histórica exige. El solar, propiedad de la Generalitat, será convertido en un espacio público, con una plaza a la que vecinos y turistas puedan acceder para contemplar los restos romanos, que estarán convenientemente restaurados y protegidos. Los vecinos del barrio, que llevan años reivindicando una solución, podrían encontrar en este proyecto una salida a sus peticiones.

Fuente: Levante