Hace poco más de un año, el actor George Clooney, por aquel entonces dedicado a la promoción de su película Monument Men, saltó a los titulares de los periódicos de medio mundo al realizar unas tajantes declaraciones en las que afirmaba que el gobierno británico debería plantearse muy seriamente la devolución de los mármoles de lord Elgin a a Grecia para su reubicación en su enclave original: el Partenón. Pese a que estas declaraciones sólo tuvieron como efecto el aumento de la popularidad de la estrella entre el agradecido público heleno, parece ser que la devolución a Grecia de los mármoles del Partenón es un tema que ha calado hondo en el entorno inmediato del actor. En esta ocasión ha sido su esposa, la abogada de origen libanés Amal Alamuddin, quien ha decidido intervenir de forma directa para presionar al gobierno británico en este sentido. Alamuddin es una profesional muy curtida en este tipo de litigios de gran impacto mediático, pues ya ejercició como letrada de personajes tan importantes como Julian Assange, fundador de Wikileaks, o Yulia Tymoshenko, ex primera ministra de Ucrania. Este interés del matrimonio Clooney por el patrimonio griego puede tener su origen en su íntimo amigo Phedor Papamichael, un director de fotografía muy involucrado en la defensa de los bienes culturales de su tierra de origen, Grecia.

Según ha declarado Amal Alamuddin, en un próximo viaje a Atenas se ruenirá con el primer ministro Samáras para tratar sobre este asunto. Pero la esposa de Clooney no estará sola. Le acompañará todo un equipo de abogados del prestigioso bufete Doughty Street Chambers, así como el presidente de la Asociación Internacional para la Reunificación de las esculturas del Partenón, David Hill. Para acallar las voces críticas que afirman que lo único que busca Alamuddin es promoción personal, ella misma ha declarado a la prensa que sus intenciones son totalmente sinceras y que apoyará hasta el final la lucha del pueblo griego por recuperar un patrimonio que les pertenece por derecho.

Fuente: ABC