Sangre de Baco

El Dios de la Guerra de Christian Cameron

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Nico | Noticia | 19/03/2014 - 09:52Comenta

El dios de la guerraAl recibir un viejo Tolomeo en su palacio de Egipto la visita de León, hijo del ateniense Kineas, amigo y camarada de grandes batallas, le narra la historia de Alejandro desde su infancia hasta su muerte. Le contará cómo un niño ambicioso y con constantes cambios de humor que se dejó llevar por su hybris, consiguió superar en hazañas a Aquiles, convertirse en Rey de Reyes y ser un Dios.

No es éste el primer libro ambientado en la Grecia Antigua de Christian Cameron. Desde hace muchos años el escritor americano se ha dedicado a contarnos los acontecimientos del mundo clásico a través de novelas. En El dios de la guerra se nos relata la vida de Alejandro pero desde los ojos de Tolomeo, uno de los mejores amigos de rey de Macedonia. Veremos como el amor que siente Tolomeo hacia Alejandro se va convirtiendo en odio hasta llegar al fatídico final.

Tras esta obra hay un gran trabajo de compilación y estudio histórico, dejando a la ficción aquellos espacios que la historia no cubre. Pero a pesar de la buena disposición y del esfuerzo del autor, no vamos a descubrir en la novela nada nuevo. Es un libro más sobre las campañas (que todos conocemos) de Alejandro Magno desde Grecia hasta la India: Queronea, Halicarnaso o la batalla del Hidaspes son algunas de éstas.

El punto “fuerte” de la obra es la minuciosidad en los detalles: gracias a la veracidad y realismo de las ropas, armaduras, alimentación o de los juegos con los que se entretenían los griegos nos metemos de lleno en la historia. Los pasajes de las luchas son, sin duda, los mejores. Nos sentiremos como un hoplita más empujando al enemigo con nuestro escudo y ayudando a Alejandro a ganar sus batallas.

Pero fuera de las contiendas, y dentro de algunas, nos vamos a encontrar un libro difícil de leer. La minuciosidad, el punto “fuerte”, se convertirá en un arma de doble filo: el detallismo en las maniobras y movimientos del ejército hará que nos perdamos y no sepamos diferenciar nuestra mano izquierda de la derecha. Las constantes divagaciones del viejo rey de Egipto, como los fragmentos sobre cuántos víveres necesita un ejército, nos sacarán de la acción y harán pesada la lectura. Exceptuando los protagonistas, el resto de personajes son llanos y aportan poco a la novela. Incluso podremos intuir lo que va a suceder debido a lo cíclica que es la obra: Tolomeo ama a su rey, Tolomeo decepcionado es apartado del círculo de allegados de Alejandro, Alejandro vuelve a confiar en Tolomeo, Tolomeo vuelva amar a su rey, y así hasta el final.

Por supuesto que es una obra trabajada con esfuerzo y muy bien documentada, pero que está falta de rapidez. Es obvio que no todo va a ser batallas, pero las escenas palaciegas, de la vida en campaña o de las conspiraciones también son lentas. Muchas de éstas se podrían eliminar del libro sin que la historia se viera alterada.